Santiago, Rep. Dom.-En éstos tiempos de precampaña, donde todos los precandidatos, aunque sean diablitos, se venden como angelitos, es tiempo de que el electorado abra los ojos y crea conciencia sobre quienes siempre lo han engañado y quienes han estado a su lado cuando la población, los ha necesitados.
Así como hay precandidatos falsos, indolentes, demagogos y con poca credibilidad en la sociedad, sobre todo, aquellos que aspiran a diputados; hay que reconocer que también hay hombres serios, decentes, trabajadores, creíbles, sinceros, probos y más aún, hombres dispuestos a trabajar por un pueblo hambriento y abandonado a la mejor de la suerte, en espera de que aparezca un chapulín colorado que saque la cara por él.
Entre todos los precandidatos que dentro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), aspiran a obtener una curul en la camara baja, resalta la figura de Domingo Moronta, un hombre que reune todas las buenas cualidades arriba mencionadas; un hombre humilde, decente, educado, solidario, amable y afable, don de gente, de trato exquisito, sin poses y sin ínfulas de grandeza.
Moronta, un próspero empresario de Santiago, que se cansó de atajar para que otro enlace, decidió tirarse al terreno de juego, cansado de ver el juego desde las gradas, agobiado de tantas injusticias, de tantas mentíras, de tantos engaños y de ver a los más vulnerables y deposeídos, sin esperanzas de mejorar su calidad de vida; es por ésas y otras tantas razones, que su precandidatura ha calado en cada uno de los barrios y comunidades que visita y ésa actitud y ése comportamiento, lo han llevado a ganarse el corazón de sus conciudadanos, el cual desde ya, lo han bautizado como el precandidato del pueblo.
Santiago necesita, exige y merece un auténtico representante en la Cámara de Diputados, un verdadero peledeísta, alguien que le duela su partido, su ciudad, su provincia, su gente y su pueblo, que luche por los más necesitados, que sea la voz de los que no tienen voz y un verdadero orgullo para su distrito, su ciudad, su provincia y su país.
Domingo Moronta, el ahora precandidato, que se convertirá en candidato en las primarias del PLD del 6 de octubre, para luego con el favor de los electores, ser elegido diputado por la circunscripción número 1, en las próximas elecciones del año venidero, demostrará con hechos tangibles, que nació para servir, que se puede ser legislador y ser serio, que se puede ser congresista sin ser corrupto y que se puede ser diputado sin ser un títere manipulable de esos que solo saben levartar su mano, para decir…Aprobado!!