Naciones Unidas, 15 mar (EFE).- El número de denuncias sobre supuestos abusos sexuales cometidos por personal de Naciones Unidas o de entidades que trabajan con ella sobre el terreno aumentó significativamente en 2021, según un informe dado a conocer este martes por la organización.
En total, la ONU recibió el pasado año 445 denuncias, 194 de ellas por casos presuntamente cometidos por empleados de la organización y sus agencias y 251 por parte de otros grupos e instituciones con las que coopera pero sobre las que no tiene autoridad.
La cifra supera con claridad las 387 quejas recibidas en 2020 y las cifras de otros años, según la información que viene publicando regularmente Naciones Unidas en el marco de una política de transparencia puesta en marcha en respuesta al escándalo generado por los abusos cometidos por «cascos azules» en varios países africanos.
En 2021, hubo 75 acusaciones contra personal de las misiones de paz de la ONU, frente a 66 el año anterior y por encima de la media de 69 que se habían recibido en los diez años anteriores.
En total, se ha identificado a 190 víctimas vinculadas a estas acusaciones, resultado de numerosos casos con víctimas múltiples que, según Naciones Unidas, hacen referencia en su mayoría a incidentes protagonizados por un contingente de miembros de la misión de paz en la República Centroafricana (MINUSCA).
En respuesta al alto número de casos, la ONU ya anunció el pasado septiembre la repatriación de todo los soldados gaboneses que participaban en esa operación.
Además, también aumentaron en 2021 los casos de supuestos abusos a menores por parte de «cascos azules», con un total de 25 acusaciones y 51 víctimas.
Casi el 90 por ciento de las denuncias contra fuerzas de paz se concentran en solo dos misiones: la MINUSCA y la operación de estabilización en la República Democrática del Congo (MONUSCO).
De las 75 acusaciones recibidas contra el personal de paz, 25 casos tuvieron lugar presuntamente en 2021, mientras que las otras 50 corresponden a años anteriores, algo que la ONU atribuye en parte a sus campañas para animar a las víctimas a denunciar.
Las acusaciones contra personal de agencias, fondos y programas de la ONU subieron en 2021 a 115, frente a 109 en 2020, mientras que las vinculadas a empleados de entidades que colaboran con la organización alcanzaron 251 frente a 244 el año anterior.
En el informe publicado hoy, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, defiende los esfuerzos para combatir los abusos sexuales y dar apoyo a las víctimas que se han puesto en marcha en los últimos cinco años, pero reconoce que no se ha logrado un éxito claro.
«Sabemos que hay que hacer más para erradicar la explotación y los abusos sexuales y estamos comprometidos a hacer lo necesario», señala Guterres.
«Ante la explotación y los abusos sexuales persistentes y generalizados, es fácil desanimarse. Sin embargo, debemos perseverar en nuestros esfuerzos», insiste el secretario general.