Las empresas familiares que logran sobrepasar una tercera generación suelen diversificar sus negocios y tienden a convertirse en grupos empresariales, explicó Raúl Serebrenik, experto en el tema de patrimonios de empresas familiares. Afirmó que, en muchas ocasiones, pasan etapas: empresas de trabajo familiar; empresas bajo la dirección familiar; empresas de gobierno familiar y, finalmente, empresas de inversión familiar.
Aseguró que el éxito de una familia empresaria no se mide sólo por la rentabilidad de sus empresas, sino también por cuántas generaciones ha impactado su esfuerzo empresarial.
Serebrenik indicó que las empresas familiares longevas cuentan con ocho capitales: estructural, humano, social, familiar, emocional, intelectual, financiero y –en el centro de todos los demás- el espiritual.
Motivó a la creación de una “Oficina de Familia” que se ocupe de todos los capitales enumerados y que integre a toda la familia a la empresa, en diversos modos de participación, pero con sentido de propiedad.
El desayuno empresarial estuvo organizado por el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), la Asociación de Industriales de la Región Norte (AIREN), la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) y Family Council Wealth Planning Consulting (FCWPC), con el auspicio del UBS Investment Banking Company.
La conferencia se celebró tanto en Santo Domingo como en Santiago de los Caballeros con un selecto grupo de empresarios y de representantes de gremios y consultorías.
El presidente del CONEP, Pedro Brache, consideró que la planificación contribuye a la sostenibilidad de patrimonios familiares, lo cual es estratégico ya que el tejido empresarial dominicano cuenta con un gran número de estas empresas. Desde su experiencia en el Grupo Rica valoró como clave la gobernanza corporativa y la planificación para la trascendencia y sostenibilidad de una empresa.
Celso Juan Marranzini, presidente de la AIRD, al hacer uso de la palabra indicó que “organizar los activos de la familia y establecer una estructura sensata para cuidar el patrimonio y velar por las futuras generaciones es un proceso que debe ser abordado a tiempo”. Afirmó que “la AIRD se siente orgullosa de ser un gremio creado por empresas familiares que hoy constituyen patrimonios familiares sólidos, llenos de valor, que han aportado al desarrollo económico y social de la nación durante décadas, persistentes en la innovación y en la búsqueda de nuevos mercados y que incluso se reorganizan para dar respuestas a las nuevas necesidades planteadas por una economía global”.
Roger Castillero, director ejecutivo de UBS llamó a no perder nunca de vista lo que significan las empresas familiares para el país, pues constituyen materia prima para seguir generando valor.
Juan Ventura, presidente de AIREN, afirmó que el compromiso de esa institución es seguir apostando a la permanencia de las empresas familiares del país y que la conferencia toca uno de los puntos que suele generar mayor necesidad de acompañamiento y claridad: el del patrimonio familiar. También detalló los servicios brindados por el Centro de Desarrollo de Empresas Familiares (CDEF), el cual ha impacto favorablemente:
• 186 empresas alcanzadas (164 han firmado protocolo de familia y 22 en proceso de consultoría).
• 13 ciudades alcanzadas: Santo Domingo, Valverde Mao, Santiago, San Francisco, Puerto Plata, Monte Cristi, Moca, La Vega, Hermanas Mirabal (Salcedo), Bonao, Jarabacoa, Tamboril y Cotuí.
• 60 consultores formados en la metodología
• 4,705 personas sensibilizadas en el tema
• 8,009 empleos formales impactados
• 4 sectores alcanzados: Servicio, comercial, industrial y agrícola.
Afirmó que es posible tener empresas familiares fuertes y duraderas, que sigan siendo soporte fundamental del bienestar económico y social de las comunidades en que se encuentran ubicadas y del país, generadoras de empleos, grandes aportadoras al fisco y parte de una red clave para hacer de la dominicana una economía sostenible y exportadora.